VOLCANOLIMITS (BTT)

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Tengo miedo pero por fin ha llegado el día... Después de más de 6 meses sin probarme por la maldita lesión, me envalentono y me inscribo a la volcanolimits de Olot, 83km con gran desnivel e íntegramente de BTT. Es la primera carrera que hago exclusivamente de BTT, y me da respeto. No sé como me irá, no sé si terminaré, no sé si sabré dosificarme y lo más importante, no sé si mi pierna aguantará!! pero ya no hay vuelta atrás, y emprendemos con la furgo camino a Olot con la idea de hacer noche en la misma zona habilitada para ello. 

Pero una vez allí, nos damos cuenta que no estamos en la costa y de noche hace una rasca que se congelan hasta las ideas.

Decidimos finalmente y tras mucho meditarlo cambiar los planes y entre carrera y cacaolat caliente encontramos un hostal digno de ver... tanto por el recepcionista (que parece que lo han sacado de una película de terror) como por la habitación (el WC está en la terraza!!), pasamos la noche como podemos y con la esperanza que la noche sea tranquila...

Suena el despertador y empezamos con el ritual que ya habíamos avanzado por la mañana: el preparar el material, comida, ropa...

Sin tiempo que perder volvemos a por la furgo que está congelada!!! y vamos dirección a la Volcanolimits.

Hay mucha gente por los accesos, párking y alrededores y se empieza a respirar ese ambientillo competitivo que tanto me gusta. No conocemos a nadie, pues es una carrera lejos de nuestro hábitat natural pero eso no nos quita la ganas de pasarlo bien y conocer la zona.

Poco a poco vamos dejándolo todo listo y me situo al final de los finales de la salida (error de novato!! y eso que el alto de las compresivas blancas ya me lo advirtió... en fin...). Me despido de Elena, que se queda por allí con la intención de salir a runnear por la zona mientras yo hacia la carrera. 

Suena la bocina y empezamos a pedalear. Con muchas ganas empiezo fuerte, muy fuerte adelantando a todos... pero se cumplen los pronósticos y en la primera trialera empezamos a tener que bajar de la bici y poner pie a tierra. Lo mismo se iba a repetir durante los primeros km de carrera debido a la gran participación, trialeras y caminos muy estrechos.

Las pendientes y senderos son muy duros y pronunciados, es ahí donde se empiezan a marcar las diferencias. Los bikers especializados adelantan a todos con una gran técnica y nivel. Tengo que reconocer que se me cae la baba al verlos como pasan, es verdaderamente increible!! y yo jugándome la vida en cada descenso para no perder más posiciones y en las subidas vaciándome hasta las entrañas. Es curioso pero la pierna por el momento no me duele, ni da signos evidentes de molestia.

Voy haciendo kilómetros. Paro en un avuituallamiento, relleno agua, como algo y continuo la marcha. Poco a poco voy disfrutando más y más con la carrera, con el paisaje, con los caminos y corredores... es ESPECTACULAR!!

Tanto es mi nivel de adrenalina y subidón, que empiezo a arriesgar demasiado, al límite y en uno de los descensos, se me clava la rueda de delante y salto despedido por encima de la bici. Son unos instantes de miedo, nunca antes me había caído de esa forma con la bici y estoy unos segundos haciendo una valoración de mi estado: cabeza, casco, piernas, manos... me dan ganas de llorar, me encuentro sólo, sin nadie a mi alrededor y no me puedo mover. A los pocos minutos pasan otros corredores que me ayudan y se preocupan por mi estado. Finalmente veo que no me ha pasado nada, me duele todo el cuerpo e intento seguir la marcha. Al subir de nuevo a la bici, me doy cuenta que tengo todo el manillar doblado hacia abajo (tipo manillar moto de gp) y sumo a mi estado físico el del manillar de la bici, ambos muy tocados lo que me hace bajar notablemente la velocidad y el no poder arriesgar. La bici no la podía controlar nada bien. 

En fin... vamos haciendo kilómetros y poco a poco se me van cargando las muñecas debido a la mala posición del manillar, lo que me hacia dudar si podría terminar la prueba.

A falta de 6km para el final, en una subida se me ancla la cadena entre el piñón grande y los radios y me cuesta una eternidad poder sacarla. Se paran varios corredores a ayudarme e intentar solucionar el problema, al final todos acaban por irse y animarme a que continúe la prueba andado, no queda otra... :(  Soy cabezón y si la cadena no estaba rota, tenias que poder sacarla!!! A lo MacGyver, me las ingenio para hacer del trinchacadenas una especie de punzón que me ayuda a poder sacar la cadena y reemprender la marcha.

Los últimos kilómetros son de toboganes fáciles y de asfalto, lo que me hace volver a subirme y crecerme de la rabia de la caída, de la cadena... y adelanto a todos los que veo delante mio, no se salva nadie!!

Finalmente llego a la linea de meta, donde Elena me espera algo preocupada pues había tardado bastante más de lo previsto y viendo el estado físico de los corredores a la llegada se estaba empezando a preocupar en exceso. Nos fundimos en un fuerte abrazo, pues tanto ella como yo lo necesitábamos. 

El finde en Olot se acaba. Ha sido un fin de semana diferente, divertido, con mucho frío y que nos ha servido para conocer nuevos lugares y vivir experiencias inolvidables.

Un beso y hasta la próxima!

PD: La pierna la he tenido casi dos semanas resentida por la carrera, así que todavía queda camino... 

PDII: Esports Mariné (Cambrils) ya tiene faena con mi bici, que requiere unos cuidados intensivos!! más o menos como yo!!!